Reto de empresas atraer y retener talento
En 2025, una de las prioridades en el mundo del trabajo será atraer y retener a los mejores talentos. Ya no bastará con ofrecer buenos salarios: las empresas deberán garantizar bienestar y flexibilidad, además de beneficios auténticos y personalizados, alineados con los valores y aspiraciones de cada colaborador.
El fantasma de la ‘renuncia silenciosa’, que en 2022 puso en alerta a muchas organizaciones, no desaparecerá del todo. Sin embargo, dará paso a una nueva discusión centrada en cómo lograr que los colaboradores quieran quedarse, no por obligación, sino porque realmente encuentran valor y propósito en su trabajo.
La tendencia apunta a entornos que combinen estabilidad económica con beneficios no salariales que permitan a las personas disfrutar de lo que verdaderamente importa: tiempo al lado de los seres queridos, calidad de vida y equilibrio entre la vida personal y laboral.
Las empresas que comprendan el poder de esta ecuación serán las grandes ganadoras en un ecosistema laboral sobre el cual existen grandes expectativas y retos por resolver. Según un estudio de Pluxee, 62 por ciento de los colaboradores planea renunciar, 50.3% presenta signos de burnout, 49% reporta un mal equilibrio entre su vida personal y laboral, 63% experimenta estrés relacionado con el trabajo y 58% admite descuido de su salud física y mental.
Ante estos datos, el mensaje es claro: las empresas que no adapten sus estrategias a las necesidades y expectativas de los trabajadores quedarán rezagadas en un mercado laboral en plena transformación, enfrentando tasas de rotación elevadas que impactan costos y productividad. Por el contrario, las organizaciones que comprendan y capitalicen esta ecuación serán las grandes triunfadoras en un ecosistema laboral que exige mayor sensibilidad hacia las señales de la fuerza laboral.
Aunque un salario competitivo sigue siendo la joya de la corona para el 59% de los colaboradores, este año las organizaciones deben escuchar las demandas de una fuerza laboral que prioriza más y mejores prestaciones al momento de elegir a un empleador (cuatro de cada diez colaboradores consideran este punto como clave).
Es indispensable que las empresas afinen su escucha e identifiquen qué necesitan sus equipos, considerando aspectos como la edad, los intereses, los momentos de vida y la salud. En este contexto, los principales generadores de satisfacción para los trabajadores son las oportunidades de crecimiento dentro de la empresa, el desarrollo profesional, un clima organizacional positivo y la flexibilidad laboral (con información de El Financiero).